Depresión

¿Cuántas personas tienen depresión en el mundo?


Más de 300 millones de personas sufren  depresión , aprox. un 4,5 % de la  población  mundial. 


¿Cuántas personas tienen depresión en España?


Más de 2 millones de personas sufren  depresión , aprox. un 5% de la población española.


La tristeza es una respuesta natural del ser humano para liberar el dolor que nos ha causado la pérdida de alguien o algo que formaba parte de nuestra vida. La ruptura con una pareja, la pérdida de un trabajo, el duelo de un miembro de la familia, un diagnóstico médico, son motivos por los que todos nos sentimos tristes.


Hablamos de depresión cuando dicha tristeza se ha cronificado y no solo no remite, sino que se asocia con otros sentimientos que la intensifican llegando a afectar a diferentes áreas de la vida. Esto ocurre cuando la pérdida se enlaza con otras pérdidas, cuando las hormonas y/o neurotransmisores están alterados, cuando se lleva un largo periodo de tiempo desempleado.

Los síntomas de la depresión pueden hacerte sentir de la siguiente manera: 


-Muy  triste  sin saber cuándo vas a dejar de sentirte así, ni por qué te encuentras así: “No sé qué me pasa”, “no quiero contárselo a nadie porque no me van a entender porque ni yo me entiendo”. Hay veces que esa tristeza lleva dentro de ti mucho tiempo y se han acumulado diferentes situaciones dolorosas que te hacen sentir triste y deprimido. 


Apático  : “no tengo ganas de hacer nada”, “no me apetece hacer ni siquiera lo que antes me gustaba hacer”. Es posible que te sientas abatido y hayas perdido el gusto por hacer cosas que antes te gustaban. 


-Sentimiento de  culpa  por cosas ya pasadas, por las que no puedes

hacer nada ahora: “no puedo dejar de sentirme culpable todo el tiempo haga lo que haga, ese sentimiento va conmigo”, “no puedo complacer a mi pareja o a mi jefe, porque no me encuentro bien y me siento culpable por ello… debería rendir más”. 


Irritable  y a la defensiva: “cuando mi pareja me dice que no le apetece el plan que le propongo ya no me apetece hacer nada más que quedarme en casa y me enfado con ella”, “si me dicen algo que no quiero oír les grito y me voy de un portazo”. 


Confuso  y que tu vida no tiene sentido: “Ya nada me motiva y no sé hacia donde tirar”. 


Cansado  mentalmente, lo cual dificulta que te concentres: “No consigo concentrarme en el trabajo y temo que me despidan”. “No paro de pensar que me encuentro mal, no hay espacio en mi cabeza para nada más” 


-Ha variado tu peso por una disminución o aumento no buscado:  “La gente me dice que me encuentra más delgado, debe ser que estoy comiendo menos. La verdad es que tengo un nudo en el estómago” 


Duermes peor o necesitas dormir más:  “Siento que estoy toda la noche despierto. En realidad, creo que me duermo, pero tengo la sensación de estar en tensión y en sueño ligero. No descanso”. 


Tu energía es muy baja:  “Me cuesta mucho hacer cualquier cosa. Lo pienso una y otra vez antes de hacerlo”. 


Tu cuerpo es más lento y pesado:  “Me noto ralentizado. Nunca he sido así. Antes hacia las cosas y me sentía bien. Ahora noto que me pesa el cuerpo y no puedo conmigo mismo”. 


-A veces, aparecen inexplicables  dolencias físicas  como molestias de espalda o de cabeza, etc. 

 ¿Qué tipos de depresión existen? 


Trastorno depresivo mayor , comúnmente denominado  depresión . La mayor parte del día se mantiene un sentimiento depresivo, poco interés en las actividades cotidianas, cambios en el peso, insomnio, cambios psicomotores, falta de energía, indecisión y pensamientos recurrentes de muerte. 


Trastorno depresivo persistente . También conocido como  distimia , los síntomas depresivos se mantienen durante al menos dos años, pudiendo mantenerse décadas. Las personas con dicho trastorno pueden sentirse habitualmente pesimistas, pasivos, críticos con respecto a sí mismos y los demás, introvertidos y sufrir desesperanza, insomnio o hipersomnia, baja energía e indecisión. 


Trastorno afectivo estacional:  aparece normalmente al inicio del otoño e invierno, y suele remitir al inicio de la primavera y verano. 


Depresión periparto y postparto:  la primera se refiere al estado depresivo leve que hace aparición durante el embarazo o dentro de las 4 semanas siguientes al parto. La segunda, hace referencia al estado depresivo leve que transcurre entre el parto y las siguientes doce semanas. 


Depresión bipolar  (es la fase depresiva de un trastorno llamado trastorno bipolar). Se han definido cuatro tipos de trastorno bipolar de acuerdo con la severidad y alternancia de estados de ánimo en el tiempo: trastorno bipolar tipo I, trastorno bipolar tipo II, ciclotimia y trastorno bipolar inespecífico. La persona que padece dichos trastornos, tiene altibajos en su estado de ánimo, que fluctúan desde sentimiento de euforia (hipomanía: sensación exagerada de felicidad, optimismo extremo, hablar mucho, elecciones imprudentes, menor necesidad de dormir, frenesí de ideas) al sentimiento de depresión más arriba especificado. 


Depresión psicótica:  La persona tiene síntomas de depresión mayor y delirios (paranoide, persecutorio, de grandeza, de referencia, entre otros) y/o alucinaciones (auditivas, visuales o sensitivas). 

   ¿Qué puede aportarte la psicoterapia individual?   


Vamos a acompañarte para que  no te sientas solo en estos duros momentos, aumentar tu comprensión del problema y que puedas adquirir herramientas  para superar la depresión: 


-Trabajamos de forma multidisciplinar con tu médico de cabecera, psiquiatra u otros profesionales implicados en tu tratamiento. 


-Trabajamos en los síntomas físicos, emocionales y cognitivos.   


-Te enseñamos herramientas para que puedas planificar y manejar tu día a día. 


-Reflexionamos acerca de tu historia para que puedas entenderte a ti mismo y cómo te afecta en tu situación actual. 


-Exploramos las áreas vitales: familia, trabajo, ocio, relaciones, etc, así como tu propósito vital y el sentido de tu vida. 


Para conseguir todo esto, utilizamos las técnicas más efectivas de las diferentes corrientes de la psicología, combinadas con aquellas que conecten mejor contigo, teniendo muy presente la importancia del vínculo en proceso: trabajo emocional, ejercicios corporales, visualizaciones y relajaciones, herramientas creativas y artísticas, la narración y técnicas cognitivas, entre otras. 




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